Un día la madre le explicó a Nuria que se tenían que marchar. También le explicó que se tendría que marchar a casa de la abuela en tren. Nuria se alegró y dijo que se iba a Barcelona. En la calle, el lobo le preguntó a Nuria qué llevaba en la cestita. Nuria respondió que llevaba arroz con leche. El lobo dijo que creía que era mermelada para su abuela. Nuria respondió que no era mermelada, pero sí que era para su abuela. Nuria le dijo al lobo que iba a ver a su abuela. El lobo le preguntó si podía probarse el postre. Nuria le dijo que sí, que creía que le había salido buenísimo.